La startup supera todos los pronósticos y cierra la mayor ronda de financiación de capital de riesgo de la historia, consolidando su posición como líder indiscutible en el mercado de IA generativa.
OpenAI, la empresa creadora de ChatGPT, ha anunciado el cierre de una ronda de financiación histórica de U$S 6.600 millones, que eleva su valoración a U$S 157.000 millones después de la inversión. Esta operación, liderada por el inversor anterior Thrive Capital, marca un hito en la industria tecnológica y consolida a OpenAI como la startup de inteligencia artificial más valiosa del mundo.
La ronda contó con la participación de inversores de renombre como Microsoft, Nvidia, SoftBank, Khosla Ventures, Altimeter Capital, Fidelity y MGX. Según informes de The New York Times y The Wall Street Journal, Thrive Capital invirtió alrededor de U$S 1.300 millones, con la opción exclusiva de aportar hasta U$S 1.000 millones adicionales al mismo valor hasta 2025. Microsoft habría invertido poco menos de U$S 1.000 millones, mientras que Nvidia comprometió U$S 100 millones y SoftBank aportó U$S 500 millones.
«La nueva financiación nos permitirá redoblar nuestro liderazgo en investigación de IA de vanguardia, aumentar la capacidad de cómputo y continuar desarrollando herramientas que ayuden a las personas a resolver problemas difíciles», declaró la compañía en un comunicado oficial.
Esta inyección de capital eleva el total recaudado por OpenAI a U$S 17.900 millones, según datos de Crunchbase, situándola en una categoría única dentro del ecosistema de startups de IA. Su valoración actual supera ampliamente a la de competidores como xAI de Elon Musk (valorada en $24.000 millones) y Anthropic, que ha recaudado $9.700 millones desde su fundación.
La necesidad de capital de OpenAI se explica por los enormes costos asociados con el desarrollo y operación de sus sistemas de IA. Según The Information, la empresa ha gastado aproximadamente U$S 7.000 millones en entrenamiento de modelos y U$S 1.500 millones en personal. El CEO Sam Altman ha revelado que el entrenamiento de GPT-4, uno de sus modelos más avanzados, costó más de U$S 100 millones.
El éxito comercial de OpenAI es innegable. ChatGPT cuenta con más de 250 millones de usuarios, de los cuales alrededor de 10 millones son suscriptores de pago. Los ingresos anualizados de la empresa han superado los U$S 3.400 millones, y se espera que solo ChatGPT genere U$S 2.700 millones este año.
Sin embargo, la compañía enfrenta una competencia creciente. Startups como Runway y Luma Labs han lanzado modelos de generación de video de alta fidelidad antes que OpenAI, cuyo modelo Sora se espera para este otoño. Anthropic continúa desarrollando una suite de productos de IA para competir con ChatGPT, mientras que gigantes como Google y Amazon invierten fuertemente en infraestructura para entrenar modelos de próxima generación.
Para mantener su ventaja competitiva, OpenAI podría aumentar significativamente el precio de su plan premium ChatGPT Plus, de U$S 20 a $44 mensuales para 2029. Además, se rumorea que la empresa podría reestructurarse para atraer más inversiones, alejándose de su actual modelo de gobernanza sin fines de lucro.
Esta transformación podría dar a OpenAI mayor libertad para explorar apuestas a largo plazo y capital intensivo, como el desarrollo de chips de IA y centros de datos propios, reduciendo así su dependencia de Nvidia. También le permitiría firmar acuerdos de licencia con proveedores de datos como Reddit y Condé Nast, lo que podría darle una ventaja competitiva y protegerla de demandas por propiedad intelectual.
No obstante, OpenAI enfrenta desafíos internos. En las últimas semanas, varios ejecutivos de alto perfil han dejado la empresa, incluyendo a la CTO Mira Murati, el director de investigación Bob McGrew y el VP de investigación Barret Zoph. Estas salidas se suman a las de figuras prominentes como Andrej Karpathy, Ilya Sutskever y John Schulman en los últimos meses.
A pesar de estos obstáculos, la reciente ronda de financiación demuestra la confianza de los inversores en el potencial de OpenAI para liderar la revolución de la IA. La empresa proyecta alcanzar ingresos de U$S 100.000 millones en 2029, igualando las ventas actuales de Nestlé. El tiempo dirá si OpenAI puede mantener su dominio en un mercado cada vez más competitivo y en rápida evolución.