Las acciones de Nvidia alcanzan un máximo histórico tras superar desafíos geopolíticos y consolidar su liderazgo en el mercado global de chips para IA.
Nvidia, el diseñador estadounidense de semiconductores, ha protagonizado un notable repunte en sus acciones, alcanzando un récord histórico intradía tras un inicio de año complicado marcado por tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
Este avance refleja la renovada confianza del mercado en la capacidad de la compañía para liderar la revolución tecnológica de la inteligencia artificial (IA) y la robótica.
El miércoles pasado, las acciones de Nvidia subieron un 4%, superando el máximo intradía registrado en enero y posicionando a la empresa en la competencia directa con gigantes como Microsoft y Apple por convertirse en la compañía más valiosa del mundo.
Este rally bursátil se produjo tras una presentación optimista de Jensen Huang, CEO de Nvidia, durante la reunión anual de accionistas, donde destacó que “estamos al comienzo de una década de construcción de infraestructura de IA: la demanda de IA soberana está creciendo en todo el mundo”.
Recuperación tras desafíos geopolíticos y tecnológicos
El optimismo en torno a Nvidia se había visto afectado previamente por dos factores clave. Primero, el avance tecnológico de la empresa china DeepSeek generó inquietudes sobre la sostenibilidad de la posición dominante de Nvidia en el mercado global de infraestructura de IA, provocando una caída en su valor de mercado de casi U$S 600 mil millones.
Segundo, las restricciones impuestas por el expresidente Donald Trump sobre los chips H20 de Nvidia destinados al mercado chino cerraron una puerta que la compañía valoraba en U$S 50 mil millones en ingresos potenciales para los próximos años.
Para sortear estas limitaciones, Nvidia está evaluando rediseñar sus chips Blackwell, lo que le permitiría continuar operando en el mercado chino cumpliendo con las normativas de exportación vigentes.
Liderazgo tecnológico y perspectivas de crecimiento
Daniel Newman, CEO del Futurum Group, atribuye el reciente rally bursátil a “la capacidad de Nvidia para moverse tan rápido como lo está haciendo”. A pesar de que otros grandes proveedores de la nube, como Amazon y Microsoft, intentan desarrollar su propia infraestructura de IA, Newman enfatiza que “en este momento, no hay situación en la que la mejor tecnología no sea Nvidia”.
La empresa se mantiene firme en su compromiso de lanzar anualmente nuevos chips de IA, con la próxima generación Vera Rubin lista para suceder a los sistemas Blackwell, que ya han experimentado una demanda masiva, incluyendo acuerdos de infraestructura soberana con países como Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos.
G. Dan Hutcheson, vicepresidente de TechInsights, señala que “Nvidia está montando una ola general de chips”, y que la recuperación del mercado tras los efectos de las tarifas impuestas por Trump y el avance de DeepSeek ha permitido corregir una situación donde “Nvidia fue sobrevendida por ambas razones”.
Un futuro prometedor en la era de la IA
El mercado global de chips para IA se proyecta alcanzar un valor de U$S 400 mil millones en los próximos cuatro años, un escenario que deja espacio para la competencia pero que refuerza la posición dominante de Nvidia. La compañía no solo lidera en tecnología, sino que también está expandiendo su alcance hacia la robótica y la infraestructura de IA soberana, sectores con un enorme potencial de crecimiento.
En resumen, Nvidia ha logrado superar importantes obstáculos geopolíticos y tecnológicos para consolidarse como un gigante tecnológico en plena expansión. Con un liderazgo visionario y una estrategia clara de innovación continua, la empresa está preparada para capitalizar las oportunidades que ofrece la era de la inteligencia artificial y mantener su lugar en la cima del mercado global.