Con una caída bursátil de más de U$S 630.000 millones en lo que va del año y un rezago evidente frente a competidores como Meta, crecen las voces que piden a Apple romper con su tradición y realizar una gran adquisición en el campo de la IA.
Apple enfrenta uno de los momentos más desafiantes de los últimos años. Mientras empresas como Meta, Microsoft y Nvidia lideran la revolución de la inteligencia artificial con inversiones millonarias y resultados visibles, la compañía fundada por Steve Jobs ha perdido más de U$S 630.000 millones en valor de mercado en lo que va de 2025, una caída del 16% en sus acciones que preocupa a inversores y analistas por igual.
El eje del malestar: la aparente lentitud de Apple para incorporar funciones de IA avanzadas a su ecosistema. “Históricamente Apple no realiza grandes fusiones o adquisiciones”, señaló Atif Malik, analista de Citigroup. “Pero los inversores serían más optimistas si Apple pudiera adquirir o invertir una participación significativa en un proveedor de IA consolidado”.
La presión por un cambio de rumbo
A diferencia de Meta Platforms Inc., que ha invertido de forma agresiva en IA —incluyendo U$S 14.300 millones en Scale AI—, Apple ha mantenido su histórica estrategia de desarrollo interno. Su última gran compra fue la adquisición de Beats por U$S 3.000 millones en 2014. Sin embargo, los tiempos cambiaron, y ahora muchos creen que es hora de modificar el enfoque.
Bloomberg informó que ejecutivos de Apple discutieron internamente una posible oferta por Perplexity AI, una startup recientemente valuada en U$S 14.000 millones. El objetivo sería incorporar talento y reforzar el desarrollo de un motor de búsqueda basado en IA. Para Dan Ives, analista de Wedbush, sería una decisión obvia: “Incluso si Apple pagara U$S 30.000 millones, sería una gota en el océano comparado con la oportunidad de monetización que puede alcanzar en IA”.
Apple cuenta con U$S 133.000 millones en efectivo y valores negociables, casi el doble que Meta, lo que le permitiría ejecutar una operación de esa magnitud sin comprometer su salud financiera. Sin embargo, la cultura corporativa conservadora ha impedido, hasta ahora, ese tipo de movimientos.
Falta de talento y cambios internos
Uno de los temas críticos es el talento. Meta logró contratar recientemente al ingeniero que lideraba el equipo de modelos de IA de Apple con un paquete salarial de cientos de millones de dólares, una oferta que Apple ni siquiera intentó igualar. Además, la empresa de Mark Zuckerberg ha ampliado su base de investigadores con contrataciones estratégicas de alto perfil.
“Apple necesita reenfocarse en talento para IA”, sostuvo Kevin Cook, estratega senior de Zacks Investment Research, aunque advirtió que las preocupaciones pueden estar sobredimensionadas: “Apple sin dudas enfrenta desafíos, pero esto no es como Google, que podría ser desplazado con mayor facilidad si queda rezagado”.
Los analistas de LightShed Partners van más allá: “Fallos en IA podrían alterar fundamentalmente la trayectoria a largo plazo de la compañía y su capacidad de crecimiento”, afirmaron Walter Piecyk y Joe Galone, quienes incluso abren la puerta a un cambio en la cúpula directiva: “Un sacudón es justo lo que Apple necesita ahora”.
En ese sentido, la empresa ya vive un proceso de renovación. Jeff Williams, director de operaciones, anunció su retiro tras una década, mientras que Luca Maestri, histórico CFO, dejó su cargo el año pasado. Aunque Bloomberg asegura que Tim Cook seguirá como CEO, no se descarta una reconfiguración de liderazgo más amplia.
¿Puede Apple ponerse al día?
Desde su presentación oficial de una estrategia de IA hace más de un año, Apple ha decepcionado con sus lanzamientos, como se vio en la WWDC de junio, donde las novedades no lograron entusiasmar al mercado. Incluso se reporta que la empresa evalúa utilizar modelos externos para la próxima versión de Siri, una señal clara de que sus desarrollos internos no alcanzan el nivel esperado.
Paul Meeks, analista de Water Tower Research, cree que Apple necesita hacer algo contundente: “Un acuerdo significativo no solo los ayudaría en IA, sino que demostraría compromiso con un cambio de cultura y una corrección de rumbo. No puede hacer IA por sí sola”.
Mientras tanto, el índice “Magnificent 7” de Bloomberg, que incluye a Apple junto con Nvidia, Meta, Microsoft, Alphabet, Amazon y Tesla, ha repuntado casi un 40% desde abril, aunque Apple quedó rezagada respecto de sus pares.
El desafío es claro: si Apple quiere recuperar el terreno perdido, deberá salir de su zona de confort y apostar fuerte por la inteligencia artificial. Y el tiempo corre.