La compañía enfrenta ventas bajas de Vision Pro y una lenta expansión de contenidos, mientras apuesta a la inteligencia artificial, robots y nuevos dispositivos para reinventar su ecosistema. ¿Logrará Apple conquistar el mercado o quedará atrás frente a sus rivales?
Apple Inc. se encuentra en el centro de la innovación y, al mismo tiempo, bajo la lupa. El Vision Pro, su ambicioso dispositivo de realidad mixta, atraviesa turbulencias por su lenta adopción en el mercado y la escasez de contenidos inmersivos, un factor clave para desatar el interés masivo de los consumidores. El precio de U$S 3.499 y la falta de características realmente irresistibles están afectando las ventas: expertos estiman que en Estados Unidos se han vendido “muy por debajo del millón de unidades” desde el lanzamiento hace un año y medio.
En la última llamada de resultados, el propio CEO Tim Cook pareció sorprendido cuando los inversores le preguntaron sobre Vision Pro, aunque defendió la estrategia de la compañía: “Es un área en la que realmente creemos”. Sin embargo, la realidad es que el headset sigue siendo un producto de nicho, con aplicaciones limitadas y una experiencia que aún no logra justificar su elevado precio para el usuario promedio.
Con el sistema operativo visionOS 26 y una interfaz mejorada, Apple ha intentado sumar widgets y hacer más amigable el dispositivo. Pero el verdadero valor diferencial, el video inmersivo, está lejos de despegar: a la fecha, solo hay 27 contenidos originales en el formato, entre conciertos, series y eventos. La empresa ha promocionado la característica desde el inicio, pero los lanzamientos han sido “gota a gota”, lo que frustra a los usuarios y limita el efecto de atracción del hardware.
Apple enfrenta una dicotomía: invertir grandes sumas en producir material original resulta muy costoso, y el bajo volumen de ventas frena la apuesta. Un ejemplo claro es la cobertura de eventos deportivos: el contenido estrella es un resumen del All-Star Game de la NBA 2024, cuando el evento de 2025 ya ocurrió seis meses atrás y no está disponible en el nuevo formato. Con solo cinco episodios de la serie “Adventure”, cuatro de “Wild Life” y dos de “Prehistoric Planet”, la falta de variedad es evidente. Incluso la impresionante función de monitor virtual resulta poco relevante para quienes no son usuarios avanzados dispuestos a pagar U$S 3.500 por ese privilegio.
Apple parece estar reservando contenido para el próximo refresco de Vision Pro, aunque esto sólo podría brindar un impulso fugaz. La próxima versión, prevista para este año, sumará un chip más veloz, pero no transformará la propuesta. Recién en 2027 se espera un modelo más ligero y económico, pero “dos años son una eternidad en tecnología”, y la categoría podría haberse transformado -o incluso desaparecer- para entonces.
La compañía deposita su esperanza en el crecimiento de la producción de videos por parte de terceros, impulsando nuevas herramientas y alianzas como la asociación con Blackmagic para la grabación y edición de material espacial. Sin embargo, si “Apple no está dispuesta a lanzar con vigor su propio contenido”, será difícil que la industria lo haga por ella.
A la par, Apple no descuidó su hoja de ruta en inteligencia artificial y hogar inteligente. Los planes incluyen el lanzamiento en 2027 de un robot de escritorio diseñado como un “compañero virtual de vida”; el debut en 2026 de un HomePod con pantalla y reconocimiento facial para competir con Google y Amazon; y un nuevo sistema operativo para el hogar, “Charismatic”, que unificará la gestión de dispositivos. También avanzan en varias versiones de Siri, incluyendo una con personalidad visual y nuevos diseños para iPhone y iPad, además de una gama completamente fresca de productos de seguridad doméstica.
Fieles a su estrategia de producto, Apple apuesta a la integración total entre hardware, software y servicios. No obstante, el éxito de esta ofensiva dependerá de los avances en inteligencia artificial: la compañía sigue corriendo desde atrás respecto a Google, Amazon y OpenAI, y sopesa alianzas o adquisiciones estratégicas para acelerar su desarrollo. “Todo depende de los avances en software de IA”, resumen fuentes internas.
En paralelo, la competencia avanza. Meta lanzará sus primeras gafas inteligentes con pantalla por debajo de los U$S 1.000—el modelo Hypernova—presionando a Apple tanto por precio como por innovación, mientras Apple logra restablecer el sensor de oxígeno en sangre en sus relojes tras un conflicto legal que privó a los usuarios estadounidenses de la función durante más de un año.
Por último, la escena interna de Apple tampoco es estable: tras la salida del CFO Luca Maestri y la próxima partida de Jeff Williams, jefe de operaciones, se esperan más cambios en las posiciones ejecutivas más altas durante el próximo año.
Apple se enfrenta, así, a un desafío doble: revolucionar la experiencia inmersiva con Vision Pro y ponerse a la cabeza en inteligencia artificial, sin perder el tren de la innovación frente a sus principales rivales. “El Vision Pro puede hacer cosas que ningún otro dispositivo logra, pero necesita muchísimo más para conquistar a la mayoría de los usuarios”, concluyen los expertos. El tiempo y la respuesta del mercado dirán si la estrategia de la manzana mordida volverá a marcar el camino.