Un boom sin precedente sacude la industria tecnológica: casi 500 startups de IA ya superan la valoración de U$S 1.000 millones y aceleran la creación de fortunas, según CB Insights. Fundadores de compañías como OpenAI, Anthropic y DeepSeek entran en el club de los milmillonarios en tiempo récord.
Mientras especialistas, medios de comunicaión, expertos y filósofos afirman que se habla demasiado de IA, en agosto de 2025, la inteligencia artificial (IA) lidera un nuevo ciclo de expansión que bate todos los récords históricos en Silicon Valley y más allá. El sector ha visto nacer 100 unicornios —empresas privadas valoradas en U$S 1.000 millones o más— sólo en los últimos dos años, integrándose a un ecosistema total de 498 startups de IA de este calibre.
El valor combinado de esta constelación tecnológica ya alcanza los U$S 2,7 billones, de acuerdo a CB Insights, y los expertos coinciden: la fiebre del oro apenas está comenzando.
A diferencia de la era puntocom de finales de los 90 —cuando nombres como eBay y Google daban sus primeros pasos— hoy el camino a convertirte en milmillonario es más veloz y accesible si construyes una empresa de IA exitosa. “Ya no es necesario pasar décadas para alcanzar la talla de Bill Gates, Mark Zuckerberg o Jeff Bezos; basta con fundar una startup de IA”, resaltan los analistas, reflejando el vértigo del crecimiento actual.
Los números hablan por sí solos: además de los casi 500 unicornios, existen más de 1.300 startups de IA valoradas en más de U$S 100 millones, lo que evidencia una ola de inversiones sin precedente en innovación y tecnología.
Ejemplos sobran. Mira Murati, ex CTO de OpenAI, fundó Thinking Machines Lab, que acaba de cerrar una ronda semilla de U$S 2.000 millones, valuando la compañía en U$S 12.000 millones. “Nunca antes vimos un auge tecnológico como este desde la burbuja puntocom”, repiten los especialistas. Y este fenómeno podría, según algunos, incluso inaugurar la era de los “trillonarios” gracias a la IA.
Multimillonarios de la nueva era
Con el alza de las valoraciones, quienes se ubican al frente de estas empresas ven dispararse sus fortunas. En marzo, Bloomberg reportó que sólo cuatro de las principales compañías privadas de IA —OpenAI, Anthropic, Safe Superintelligence y Anysphere— ya han generado al menos 15 nuevos multimillonarios, sumando un patrimonio conjunto de U$S 38.000 millones. Desde entonces, más de una docena de unicornios han sido coronados.
Este auge se sostiene en el crecimiento de la inversión de riesgo. Según Crunchbase, el financiamiento global de startups tecnológicas en 2024 superó los registros de 2023, con la IA liderando el salto más pronunciado año a año. Los fundadores y ejecutivos de empresas como Anthropic —donde Dario Amodei, CEO, ya superó los U$S 1.000 millones de patrimonio— también se benefician de esta ola inversora. Anthropic, fabricante del chatbot Claude, está negociando una nueva ronda de U$S 5.000 millones, lo que podría ubicar su valoración en U$S 170.000 millones.
En Asia, el fenómeno no es menor: Liang Wenfeng, fundador de DeepSeek (con operaciones entre China y Silicon Valley), ya figura en el club de los milmillonarios gracias al valor de su empresa de IA de bajo costo.
El fenómeno alcanza a los gigantes tecnológicos
Las grandes tecnológicas tampoco se quedan atrás. Nvidia, emblema de la revolución de hardware para IA, superó una capitalización de mercado de U$S 4 billones, y su CFO Colette Kress y EVP Jay Puri se unieron al CEO Jensen Huang en las filas de los milmillonarios. Por su parte, Palantir experimentó su primer trimestre de ingresos superiores a U$S 1.000 millones, empujando el patrimonio conjunto de los fundadores Peter Thiel y Alex Karp en U$S 17.000 millones adicionales.
Este ciclo imparable, que algunos no dudan en calificar como “la nueva fiebre del oro tecnológica”, ha transformado la dinámica del sector, disparando valoraciones y fortunas a un ritmo que desafía los precedentes históricos.
¿Hacia una era de trillonarios?
De acuerdo a especialistas y plataformas financieras, el ritmo y escala de creación de riqueza en IA podría incluso generar los primeros trillonarios del planeta. Con el financiamiento creciente y una adopción acelerada de servicios inteligentes en todas las industrias, el sector de la inteligencia artificial se consolida como el principal motor de riqueza y disrupción del siglo XXI.
En este escenario, los miles de millones de dólares invertidos y el surgimiento de nuevas fortunas refrendan la idea central: la inteligencia artificial no sólo cambia el mundo de los negocios, sino que redefine lo que es posible para una generación entera de emprendedores y visionarios tecnológicos.