Creada por un emprendedor de 22 años, ya consiguió U$S 6,75 millones y promete revolucionar la seguridad en blockchain con inteligencia artificial.
En un ecosistema cripto que ha sido históricamente terreno fértil para hackers, una nueva promesa tecnológica busca frenar los ataques antes de que ocurran. Se trata de Octane, una plataforma de ciberseguridad impulsada por inteligencia artificial, fundada por Giovanni Vignone, un emprendedor de apenas 22 años que abandonó sus estudios en la Universidad de Duke para atacar de lleno uno de los problemas más críticos del sector: la seguridad en contratos inteligentes.
Desde 2012, más de U$S 11.000 millones han sido robados en ataques a protocolos cripto, según datos de DeFiLlama. Las auditorías de contratos inteligentes, aunque son una práctica común, a menudo llegan tarde, son manuales y no logran prevenir vulnerabilidades a tiempo. “En cripto, cada hackeo equivale a vaciar una cuenta bancaria. Es como hackear JPMorgan cada vez”, explicó Vignone a Forbes.
Inversores de peso y un modelo disruptivo
Octane acaba de anunciar una ronda semilla de U$S 6,75 millones, liderada por Archetype y Winklevoss Capital, el family office de Tyler y Cameron Winklevoss, fundadores del exchange Gemini. También participaron otros inversores estratégicos como Circle, Druid Ventures, Duke Capital Partners y figuras relevantes del ecosistema, como Balaji Srinivasan, ex CTO de Coinbase.
El diferencial de Octane es claro: en lugar de limitarse al modelo tradicional reactivo de auditoría, propone una defensa continua basada en IA. “Queremos entregarle a cada equipo cripto un ingeniero de seguridad con inteligencia artificial”, afirmó Vignone.
“Los equipos están gastando entre U$S 150.000 y U$S 200.000 al año en auditorías y aún así siguen siendo hackeados. Lo que queremos es un enfoque continuo en seguridad”.
Tecnología que anticipa vulnerabilidades
La plataforma de Octane está entrenada con un amplio set de datos reales: exploits conocidos, reportes de auditorías y repositorios de código abierto. Esto le permite identificar fallas como tasas de cambio susceptibles a frontrunning o contratos de swap drenables en menos de un minuto.
Actualmente, Octane ya cuenta con 15 clientes corporativos, entre ellos Circle, el emisor de la stablecoin USDC, que tiene una capitalización superior a los U$S 60.000 millones, y Decent.xyz, una plataforma que facilita transacciones entre blockchains. Gemini también está evaluando integrar la tecnología de Octane en su stack de seguridad.
Los hermanos Winklevoss destacaron en un comunicado conjunto: “Creemos que Octane establecerá un nuevo estándar en la seguridad de contratos inteligentes, brindando mayor resiliencia y confianza al ecosistema, y eventualmente, al dominio más amplio de la ciberseguridad”.
Proyecciones a largo plazo
Aunque el foco actual de Octane está puesto en vulnerabilidades en contratos inteligentes, la visión de la empresa va mucho más allá. Vignone anticipa que el próximo paso será enfrentar ataques más complejos como el reciente robo a Bybit, que implicó U$S 1.400 millones y utilizó técnicas de phishing y malware.
La nueva financiación será destinada a escalar el producto, ampliar el equipo de ingeniería y profundizar el alcance de la compañía en el ecosistema Web3. “Gio es un fundador raro: ve el presente con claridad, sabe lo que hay que construir y puede armar un equipo de clase mundial para hacerlo realidad”, aseguraron los Winklevoss.
En un contexto donde la carrera por asegurar la infraestructura del mundo descentralizado es tan vertiginosa como la innovación misma, Octane propone una solución que, según sus creadores, “no solo protege, sino que también evoluciona con las amenazas”.